Cerca de 1.000 bomberos forestales en Galicia amplían su contrato a 8 meses en 2025 y a 9 en 2026, reforzando la prevención y lucha contra incendios.
Más estabilidad laboral y mayor capacidad operativa en la lucha contra incendios. Desde hoy, cerca de 1.000 profesionales fijos-discontinuos del Servicio de Prevención y Defensa contra Incendios Forestales (SPIF) inician su actividad con una importante novedad: su periodo de contratación se amplía a ocho meses en 2025 y alcanzará los nueve en 2026.
Este refuerzo forma parte de un proceso progresivo de estabilización del personal, que hasta 2023 solo trabajaba seis meses al año y que, gracias a esta medida, verá mejoradas sus condiciones laborales y su capacidad de respuesta ante emergencias forestales.
Un dispositivo clave para la protección del medio rural
El personal que se incorpora hoy al operativo desempeña funciones esenciales en la prevención y extinción de incendios. La mayoría son bomberos forestales, pero también se incluyen jefes de brigada, conductores de motobombas, vigilantes, emisoristas y técnicos especializados.

Esta ampliación responde a la necesidad de garantizar un dispositivo profesional, público y versátil, que refuerce la protección del medio rural y la capacidad de reacción ante incendios en Galicia. Actualmente, dos tercios del personal del SPIF ya trabajan todo el año, y la meta es que, al finalizar este proceso de estabilización, todos los efectivos operen un mínimo de nueve meses anuales.
Una estrategia a largo plazo contra los incendios
Esta iniciativa se enmarca en la estrategia de planificación preventiva que busca reducir la incidencia de incendios en zonas de alto riesgo. La lucha contra el fuego no puede depender solo de actuaciones de emergencia en temporada alta; requiere una estructura operativa estable y bien coordinada durante todo el año.
Con más de 3.000 profesionales dedicados a la protección forestal, Galicia refuerza su apuesta por un modelo más preventivo y estructural en la lucha contra incendios. Más empleo estable, más recursos y una mejor planificación para proteger los montes gallegos.


