- UPA exige que la nueva PAC priorice a las pequeñas explotaciones, mientras el comisario europeo de Agricultura promete más protección al sector agrario.
La Política Agraria Común (PAC) está en el centro del debate europeo. Mientras las grandes corporaciones ganan terreno, los agricultores familiares luchan por sobrevivir en un entorno cada vez más hostil. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha llevado su reclamo a Bruselas: es hora de que la PAC refuerce su compromiso con las pequeñas explotaciones, verdaderas garantes del equilibrio territorial y la seguridad alimentaria en Europa.
En un encuentro organizado por el Comité Económico y Social Europeo y el Parlamento Rural Europeo, José Manuel Roche, secretario de Relaciones Internacionales de UPA, defendió ante el comisario de Agricultura de la UE, Christophe Hansen, la necesidad de un modelo agrario más justo. “No podemos permitir que la PAC siga beneficiando a los grandes mientras las explotaciones familiares desaparecen”, afirmó Roche, insistiendo en que estas no solo generan empleo en el medio rural, sino que también preservan el paisaje, la biodiversidad y la cultura local.
Bruselas responde: más protección y menos burocracia
El comisario Hansen ha recogido el guante y ha prometido medidas concretas. En su visita a Madrid, donde se reunió con el ministro Luis Planas y consejeros autonómicos, dejó claro que Europa reforzará la protección al sector agrario ante la competencia desleal y los retos climáticos. Para ello, anunció la simplificación de la PAC en dos fases: la primera en primavera y otra antes de fin de año. “Queremos una PAC más clara, accesible y eficaz para los agricultores”, aseguró Hansen.
Además, el comisario subrayó que el nuevo marco agrario europeo apostará por la sostenibilidad, la equidad y el relevo generacional, claves para asegurar el futuro del campo. La Comisión Europea, según adelantó, ya trabaja en mecanismos que impedirán que las importaciones agrícolas usen productos fitosanitarios prohibidos en la UE, evitando así la competencia desleal.
España presiona por más presupuesto y justicia en el campo
Por su parte, el ministro Planas insistió en la necesidad de un presupuesto fuerte y diferenciado para la PAC, que garantice la estabilidad del sector. “Defendemos una PAC que ayude a quienes más lo necesitan, con precios justos para los productores y medidas de apoyo específicas”, afirmó.
En la misma línea, varias comunidades autónomas destacaron la urgencia de una PAC más sensible a las realidades locales. Desde Castilla-La Mancha se pidió claridad sobre el impacto económico de las nuevas políticas, mientras que Cataluña y Navarra insistieron en la necesidad de agilizar trámites y reforzar la agricultura familiar. Canarias, por su parte, reclamó una actualización del programa Posei para las regiones ultraperiféricas.
Solidaridad con los afectados por la DANA
La visita de Hansen a España también incluyó una parada en Valencia, donde expresó su apoyo a los agricultores afectados por la DANA de octubre. Como parte del respaldo europeo, España recibirá 68 millones de euros del fondo de crisis de la PAC, de los cuales 15 millones irán destinados a paliar los efectos de la sequía y 53 millones a municipios con daños por la DANA.
Con la reforma de la PAC en el horizonte, la pregunta sigue abierta: ¿será este el punto de inflexión que necesita la agricultura familiar para sobrevivir en la Europa del futuro?