- La apicultura española, al borde del colapso por precios hundidos, importaciones descontroladas y crisis climática. UPA reclama soluciones inmediatas.
El sector apícola español está en una situación crítica. Los apicultores alertan de un escenario insostenible, con precios muy por debajo de los costes de producción, un aumento masivo de importaciones de miel a bajo precio y problemas sanitarios agravados por el cambio climático. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha alzado la voz y exige medidas inmediatas a las Administraciones. De lo contrario, advierten, habrá movilizaciones.
Precios hundidos y una avalancha de importaciones
Desde hace dos años, el mercado de la miel en España está prácticamente paralizado. Los precios en origen rondan los 1,76 €/kg, mientras que los costes de producción superan los 4 €/kg, una diferencia insostenible para los productores. Al mismo tiempo, las importaciones han crecido un 19% en el último año, con 29.000 toneladas de miel procedentes de países como China (+30%), Ucrania (+84,7%) o Uruguay (+36%).
La UPA denuncia que estas importaciones no están sujetas a los mismos estándares de calidad y controles que la miel producida en la UE, generando una competencia desleal que pone en jaque a los apicultores españoles. A esta situación se suma la amenaza del acuerdo UE-Mercosur, que podría agravar aún más la crisis.
Colmenas en peligro: enfermedades, clima extremo y especies invasoras
El problema no es solo económico. La producción de miel en España ha caído un 21% en los últimos dos años, situándose en mínimos históricos con apenas 27.000 toneladas anuales. Factores como la alta mortalidad de abejas por la Varroa, la proliferación de especies invasoras como la avispa asiática (Vespa velutina) y el impacto del cambio climático (sequías, olas de calor, alteraciones en la floración) están golpeando con dureza al sector.
España es el país con más colmenas de la UE, con 2,8 millones (14% del total europeo), pero su número no deja de disminuir. En las últimas tres campañas se ha perdido un 9% de las colmenas, afectando a 36.800 explotaciones y poniendo en riesgo la labor de miles de apicultores profesionales.
El sector exige respuestas antes del 10 de febrero
Ante esta crisis sin precedentes, UPA ha reclamado medidas urgentes al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Entre sus exigencias destacan:
- Refuerzo de los controles en las importaciones de miel.
- Garantizar una trazabilidad real en la comercialización.
- Cumplimiento estricto de la Ley de la Cadena Alimentaria.
- Campañas de promoción de la miel y los productos apícolas.
El Ministerio ha respondido y ha convocado una reunión para el 10 de febrero. “Esperamos soluciones concretas y urgentes”, señala UPA. “Si no las hay, iniciaremos movilizaciones”.
El futuro de la apicultura española está en juego. La pregunta es si las Administraciones actuarán a tiempo o si el sector se verá abocado a una lucha en las calles para defender su supervivencia.
