- El sector agroalimentario gallego destaca la importancia de la PAC en la estabilidad del rural, su viabilidad económica y su impacto ambiental positivo. La Xunta aboga por reducir burocracia y adaptar las ayudas a las necesidades reales de agricultores y ganaderos.
La Política Agraria Común (PAC) es mucho más que un sistema de subvenciones para el sector primario. Representa un pilar estratégico para el mantenimiento de la actividad agraria, la fijación de población en el rural y la seguridad alimentaria de toda la sociedad. Así lo reivindicó la conselleira de Medio Rural, María José Gómez, en el Foro Banco Santander: Situación de los mercados y PAC 2025, celebrado en el Pazo Vista Alegre de Vedra.
Durante su intervención, la conselleira insistió en la necesidad de defender y mejorar la PAC en un contexto de incertidumbre sobre su financiación en la Unión Europea. Subrayó que las explotaciones gallegas desempeñan un papel esencial no solo en la producción de alimentos de calidad, sino también en la conservación del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático. “La PAC no solo sostiene el sector primario, sino que es una garantía para la sociedad en su conjunto”, afirmó.
Menos burocracia, más adaptación a la realidad
Uno de los principales retos que enfrenta la PAC es su excesiva carga burocrática, un obstáculo que desde la Xunta buscan reducir. María José Gómez destacó la necesidad de simplificar los trámites administrativos para que agricultores y ganaderos puedan acceder a las ayudas de manera más ágil y efectiva. “No podemos permitir que los profesionales del campo dediquen más tiempo a papeleo que a su verdadera labor”, señaló.
Entre las novedades que ya se han implementado en la convocatoria de 2025, la Xunta ha introducido medidas para facilitar la solicitud de ayudas destinadas a la cría de razas autóctonas en riesgo de desaparición, el impulso de la agricultura ecológica y la flexibilización en la rotación de cultivos para mitigar los efectos de fenómenos meteorológicos adversos.
224 millones en ayudas para más de 23.000 beneficiarios
El compromiso del Gobierno gallego con el sector se traduce en cifras: la última convocatoria de la PAC prevé un presupuesto de 224 millones de euros que beneficiará a más de 23.000 agricultores y ganaderos en Galicia. Además, la comunidad autónoma se ha posicionado como líder en la gestión de estos fondos, con un 83% de los pagos ya realizados antes de finalizar 2024, frente al 53% de la media estatal.
Este apoyo financiero es crucial para garantizar la rentabilidad de las explotaciones y su competitividad en un mercado globalizado. “Los pagos de la PAC no son solo una cuestión de apoyo al sector primario, sino una inversión en la calidad y sostenibilidad de lo que comemos”, afirmó la conselleira.
Un modelo de producción con garantías
Gómez también destacó que la normativa europea en materia agroalimentaria es la más exigente del mundo en términos de seguridad alimentaria, bienestar animal y sostenibilidad ambiental. Gracias a las ayudas de la PAC, los productores gallegos han podido adaptarse con éxito a estas exigencias, manteniendo altos estándares de calidad en sus productos.
“Lejos de ser una carga, estas normativas son una garantía de que el modelo agrario europeo sigue siendo referencia mundial. Pero para que esto sea sostenible a largo plazo, es fundamental que las ayudas continúen y se ajusten a la realidad del sector”, concluyó.
En un contexto de cambios y desafíos globales, la PAC sigue siendo un factor determinante para el futuro del agro gallego y su contribución al conjunto de la sociedad. La clave estará en lograr un equilibrio entre apoyo financiero, adaptación a las necesidades del sector y una gestión eficiente que permita a los productores centrarse en lo que mejor saben hacer: alimentar a la población con productos de calidad.