- Los terneros frisones gallegos, antes considerados un problema para las granjas lácteas, alcanzan precios históricos debido a la escasez de ganado y la creciente demanda internacional.
En un giro inesperado del mercado ganadero gallego, los terneros frisones, tradicionalmente vistos como un desafío para las explotaciones lácteas, han experimentado una revalorización sin precedentes. Hasta hace poco, el nacimiento de un macho frisón suponía un inconveniente económico para las granjas lecheras de Galicia. Mientras las hembras se destinaban a la producción de leche, los machos carecían de demanda, llegando a ser regalados o vendidos a precios irrisorios.
Sin embargo, recientes informes indican que estos terneros han alcanzado cotizaciones históricas. Según datos de la Central Agropecuaria de Silleda, los terneros frisones de 15 a 20 días registraron un precio medio de 213 euros, más del doble de los 104 euros de hace un año. Los animales de entre 21 y 50 días alcanzaron una media de 238 euros, un incremento del 75% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Los ejemplares de más de 50 días se revalorizaron un 83%, situándose en 326 euros de media.
Esta tendencia al alza se atribuye a una combinación de factores. La escasez de ganado para cebo ha impulsado la demanda de terneros frisones. Además, mercados internacionales como Argelia y Marruecos han incrementado sus importaciones de carne gallega. En particular, la carne de vaca rubia gallega ha comenzado a exportarse a Marruecos, lo que ha generado preocupación entre los ganaderos locales por un posible desabastecimiento en el mercado interno.
La prolongada sequía en Marruecos ha llevado al rey Mohamed VI a cancelar la tradicional Fiesta del Cordero debido a la escasez de ganado. Esta situación ha incrementado la demanda de carne importada, beneficiando a los productores gallegos.
Este escenario refleja un cambio significativo en la percepción y valorización de los terneros frisones en Galicia, transformando lo que antes era considerado un desecho en un activo valioso para el sector ganadero.