- La Xunta de Galicia no ha implementado medidas efectivas para apoyar a los viticultores de la Ribeira Sacra, que enfrentan graves dificultades económicas por la falta de recogida de uva.
El Sindicato Labrego Galego-Comisións Labregas (SLG) ha convocado una reunión abierta para hoy, lunes 30 de septiembre, a las 19:00 horas en el salón de actos del edificio sindical en Monforte de Lemos. El objetivo es debatir con los viticultores de la Ribeira Sacra las estrategias a seguir ante la crisis económica que afecta a más de 500 productores, cuya uva no ha sido recogida.
A pesar de los anuncios de la Xunta de Galicia, los viticultores no han recibido ninguna medida de apoyo directo. Tampoco se ha presentado un plan de acción que proteja la vendimia del próximo año, lo que aumenta la incertidumbre en la región. La viticultura no solo es clave para la economía local, sino que también sostiene miles de empleos indirectos, desde el turismo hasta la hostelería.
El pasado fin de semana, el SLG organizó una protesta frente al Pazo de Sober, donde se encontraba el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. Ante la movilización, Rueda optó por abandonar el recinto por la parte trasera, evitando a los manifestantes. Paralelamente, el SLG entregó una carta dirigida a Rueda, instando a la creación de una mesa de trabajo con todos los actores del sector. La propuesta incluye medidas urgentes como la poda en verde, la reducción de rendimientos, la limitación de nuevas plantaciones y ayudas directas para 2025.
El SLG subraya que las acciones adoptadas por la Consellería de Medio Rural han sido insuficientes. La “destilación de crisis”, que llegó tarde, no resolvió el problema de los depósitos llenos en las bodegas, y las ayudas para el mantenimiento del paisaje no benefician a quienes malvendieron sus uvas o no lograron vendimiarlas. Además, preocupa el abandono de viñedos si no se toman medidas inmediatas, lo que podría comprometer tanto la producción vinícola como otras actividades, como el turismo, estrechamente vinculadas al paisaje vitivinícola.
Entre las propuestas del SLG también se encuentra una campaña de promoción diferenciada para la Denominación de Origen (DO) Ribeira Sacra, así como la elaboración de un mapa claro que defina los límites de la DO. El sindicato insiste en la necesidad de trabajar de inmediato para asegurar la continuidad del sector y evitar el deterioro del entorno productivo y paisajístico de la Ribeira Sacra.
Con la vendimia prácticamente terminada, unos 500 viticultores se han visto obligados a vender sus uvas a precios muy bajos a particulares o a destinarlas al autoconsumo, lo que agrava aún más la situación. Sin una intervención decidida, el futuro de la viticultura en la Ribeira Sacra, y de las personas que dependen de ella, está en grave riesgo.