- La organización de mujeres rurales FADEMUR impulsa cinco cursos gratuitos para mejorar el acceso a tecnologías entre las personas mayores, destacando su situación de vulnerabilidad.
Con motivo del Día Internacional de las Personas de Edad, FADEMUR ha puesto de manifiesto la creciente brecha digital que afecta a este colectivo en el medio rural. La organización denuncia que las dificultades de acceso a internet y a dispositivos tecnológicos limitan la inclusión social y el acceso a servicios básicos.
A pesar de los avances en conectividad en España, el 15% de la población rural carece de una conexión de calidad, lo que se traduce en aproximadamente 1,5 millones de personas con acceso limitado a servicios digitales, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). FADEMUR destaca que, en áreas rurales, solo el 32% de las personas mayores de 65 años utiliza internet regularmente, en comparación con el 87% en zonas urbanas.
“Las dificultades para acceder y manejar tecnologías digitales agravan la exclusión social de las personas mayores en el medio rural”, señala la organización. Además, un 30% de estos mayores no dispone de un smartphone o dispositivo digital, y más del 40% de las mujeres rurales de más de 65 años carece de habilidades digitales básicas.
FADEMUR exige medidas urgentes para abordar esta problemática, incluyendo la mejora de infraestructuras de telecomunicaciones y el desarrollo de programas formativos adaptados a las necesidades de las personas mayores. También enfatizan la importancia de diseñar plataformas digitales inclusivas y crear redes comunitarias de apoyo.
Para contribuir a cerrar esta brecha digital, FADEMUR ha lanzado cinco cursos gratuitos en el marco de su programa ‘Cuidándonos para Un Futuro Mejor’. Estos cursos están diseñados para facilitar la inclusión digital de las personas mayores y abarcan temas como la gestión emocional, la conciliación familiar, la alimentación saludable y el autocuidado en situaciones de emergencia.
Desde su creación en 2018, el programa ha sido apoyado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, y tiene como objetivo promover un envejecimiento saludable y activo entre la población mayor rural.