- José González aseguró que hace falta establecer medidas como el IVA cero para que los productores puedan cubrir sus costes de producción y mantener una margen de beneficio, con el objetivo de que sus explotaciones puedan seguir siendo rentables
- Señaló que la Xunta estará vigilante en el cumplimiento de la prohibición de venta a pérdidas a través del Servicio de la Cadena Agroalimentaria y Control de Prácticas Comerciales Desleales
- Solicitó al Gobierno central que lidere la petición dentro de Europa de -en la medida del posible- relajar todos los requerimientos de la implantación de la nueva Política Agraria Común (PAC), con el fin de asegurar la viabilidad de las explotaciones agropecuarias
Madrid, 17 de abril de 2023.- El conselleiro del Medio Rural, José González, participó esta tarde en el Consello Consultivo de Política Agrícola y Política Pesquería para Asuntos Comunitarios en Madrid. Allí el conselleiro instó al Gobierno central a trabajar en conjunto para bajar la inflación sin reducir el precio de origen de los productos agroalimentarios, tales como la carne.
Así, José González aseguró que hace falta establecer medidas como el IVA cero para que los productores alimentarios en general puedan cubrir también sus costes de producción y mantener un margen de beneficio, con la finalidad última de que sus explotaciones puedan seguir siendo rentables. En este sentido, matizó que es fundamental que las administraciones lleven a cabo un control del cumplimiento de la prohibición de la venta a pérdidas, tomando medidas de control de la inflación, ya que pedir que se bajen los precios en origen es poner en peligro a viabilidad de las explotaciones agropecuarias.
De esta forma, el conselleiro señaló que la Xunta estará vigilante a través del Servicio de la Cadena Agroalimentaria y Control de Prácticas Comerciales Desleales, que asumió las funciones de la Agencia de Información y Control Alimentario en Galicia para dar cumplimiento a los deberes de la Ley de la cadena alimentaria.
En esta línea, cabe poner en valor las estrategias de dinamización impulsadas por el Gobierno gallego, tanto la del sector lácteo como la de la carne, con las que se defiende que se consolide una relación equilibrada entre ganaderos, industria y distribución, para que el valor generado se reparta de manera armónica a lo largo de toda la cadena. Así, señaló, defendemos que se garantice que ningún productor reciba por su producto menos del que le costó producirlo. En esa línea, en el marco de las Estrategias, el Gobierno gallego impulsó las herramientas Contaláctea y Contacarne para facilitar a los ganaderos el cálculo de sus costes de producción y el reforzamiento de su posición negociadora de los precios con la industria.
Simplificación y flexibilidad de la nueva PAC
Además, toda vez que en el segundo semestre del año 2023 España va a tener la presidencia de la Unión Europea, el conselleiro solicitó al Gobierno central que lidere la petición dentro de Europa de -en la medida del posible- relajar todos los requerimientos de la implantación de la nueva Política Agraria Común (PAC). De hecho, señaló, durante toda la negociación de la PAC, la Xunta ya había avisado de que no se estaba trabajando en el aspecto burocrático de este nuevo período y, ahora, están apareciendo las incidencias, tanto en la tramitación informática de las ayudas como con dificultades de entendimiento de los requerimientos de los decretos estatales. Ante esta situación, desde la Xunta se solicitó la ampliación del período de solicitud de las ayudas de la PAC, una de las más importantes para el sector primario.
Asimismo, José González indicó que nadie está en contra de cumplir los requerimientos medioambientales, pero sí que haya una flexibilidad, y más se tenemos en cuenta a situación de extraordinario incremento de los costes de producción que se produjo a consecuencia de la invasión rusa de Ucrania. De hecho, desde lo Gobierno gallego se reiteró nuevamente la posibilidad de retrasar la entrada en vigor del cuaderno digital hasta el año 2024, puesto que su implantación supondrá nuevos costes para las granjas que pueden poner en peligro a viabilidad económica de las explotaciones.