- Los ganaderos gallegos contarán con nuevas ayudas dentro de la PAC 2025, con un presupuesto de 800.000 euros para impulsar razas autóctonas y la producción ecológica.
La conservación de las razas autóctonas y el crecimiento de la producción ecológica en Galicia recibirán un nuevo impulso con la Política Agraria Común (PAC) 2025. La nueva campaña incluirá ayudas específicas para quienes se incorporen a estas actividades, destinando 800.000 euros a su desarrollo.
Un esfuerzo por preservar la biodiversidad ganadera
Galicia alberga un patrimonio genético único en su cabaña ganadera, con seis razas bovinas autóctonas —Cachena, Caldelá, Frieiresa, Limiá, Vianesa y Rubia Galega— y otras cinco especies reconocidas: Ovella Galega, Cabra Galega, Porco Celta, Cabalo de Pura Raza Galega y Galiña de Mos. En total, más de 75.500 animales forman parte de este valioso ecosistema productivo.
El Centro de Recursos Zooxenéticos de Galicia, situado en el Pazo de Fontefiz (Coles, Ourense), es el epicentro de los programas de conservación y fomento de estas razas, desempeñando un papel clave en su protección. Desde este enclave, se trabaja en la mejora genética, el mantenimiento de los censos y la promoción del consumo de productos derivados de estas especies.
Inversión y ayudas para el sector
Además del presupuesto específico de la PAC, la Xunta de Galicia refuerza su compromiso con este modelo ganadero a través de acuerdos con asociaciones sectoriales y ayudas directas a los criadores, con una inversión total de más de un millón de euros en 2025.
El impacto de estas medidas se enmarca en una estrategia más amplia para fortalecer el sector agroganadero gallego. La PAC 2025 contará con un presupuesto global de 224 millones de euros, beneficiando a unos 23.000 agricultores y ganaderos en toda la comunidad.
Un futuro sostenible para la ganadería gallega
El crecimiento del sector ecológico y la preservación de razas autóctonas no solo son fundamentales para la economía rural, sino también para la sostenibilidad y el equilibrio ambiental. La apuesta por estas líneas de producción refuerza el valor añadido de los productos gallegos y contribuye a un modelo agrícola más resiliente y diferenciado en los mercados.
El reto ahora es que estas ayudas lleguen a los ganaderos y agricultores de forma efectiva, asegurando que las razas autóctonas y la producción ecológica sigan siendo una parte esencial del paisaje rural gallego.