A Bruselas le sobran ganaderos
La Comisión Europea diseña una estrategia para la reducción de gases de efecto invernadero en la UE —Unión Europea—. Entre las medidas que se estudian figuran la mejora en la gestión de suelos y bosques, desarrollo de la agricultura de precisión y… ¡reducción de la cabaña de rumiantes! El anuncio no es una sorpresa para los ganaderos, que lo reciben como una medida más en su contra. Se comenzó con la reforma de la PAC —Política Agraria Común— de 2014, donde los agricultores-ganaderos fueron penalizados por la convergencia de las ayudas. Se continuó con el «Plan Juncker», para evitar los bloqueos de la OMC —Organización Mundial del Comercio— en el comercio internacional, firmando un montón de acuerdos bilaterales de libre comercio en los cuales la ganadería es utilizada sistemáticamente como moneda de cambio por los negociadores europeos. Y, finalmente, esta vez al amparo del «cambio climático», Europa quiere reducir el número de ganaderos proponiendo a los europeos un menor consumo de carne y derivados de la leche: «Una reducción en la producción de carne en la UE reduciría la cantidad de metano emitida y la producción de alimentos para el ganado, lo cual a su vez reduciría las necesidades de abono y, por tanto, las emisiones de óxidos nitrogenados, liberando además tierras potencialmente arables». Coordination Rurale considera que esta argumentación no se sostiene, pues la hierba se produce esencialmente en terrenos no laborables, y preservar la complementariedad ganadería/cultivos extensivos permite conservar la vitalidad de los suelos. Por tanto, estas medidas pueden ser contraproducentes a largo plazo: según el INRA —Instituto Nacional de la Investigación Agronómica—, ya se aprecia una fuerte bajada del contenido de materia orgánica en los suelos laborables de llanura, donde hace tiempo que ha desaparecido la ganadería, que está obligando a utilizar más abonos minerales. Coordination Rurale considera una hipocresía esta actitud de la Comisión Europea, la cual, por otra parte, está facilitando la importación de carne proveniente de países muy poco respetuosos con el medio ambiente, como son Brasil, Canadá o Australia: «La Comisión no quiere reducir la contaminación ligada a la ganadería. Lo único que quiere es deslocalizarla hacia América y Oceanía».
Coordination Rurale
El precio del gasóleo agrícola, sin techo
Unión de Uniones denuncia que, de julio a octubre de 2018, el precio del gasóleo agrícola ha subido cuatro veces más que el petróleo. Tras hacer un análisis de los datos resalta que, en ese período, el barril de petróleo OPEP —Organización de Países Exportadores de Petróleo—se ha incrementado en un 11 %, mientras que, en el mismo período, el gasóleo agrícola ha pasado de un promedio de 0,679 €/litro a los 0,961 €/litros actuales, con muchas zonas en donde supera el euro y un incremento del 41,5 %. En octubre, llenar un depósito de un tractor —unos 300 litros— le cuesta a un agricultor el equivalente a media tonelada más de cebada de lo que costaba en julio. Esta subida coincide en el tiempo con el anuncio del Gobierno del aumento de los impuestos a los combustibles diésel, que ha generado incertidumbre en el sector agrario y otros colectivos acerca de si ello repercutirá, y cómo, a los gasóleos de uso profesional. Aproximadamente la cuarta parte del precio son impuestos, si bien en determinados momentos ha llegado a representar el 50 %. El IVA —Impuesto sobre el Valor Añadido— constituye la mayor proporción, aunque también se halla afectado del IEH —Impuesto Especial de Hidrocarburos—, que grava el combustible agrícola simultáneamente con un tipo general de 78,71 €/1.000 litros, un tipo especial de 6 €/1.000 litros y un tipo autonómico variable, a decisión de las Comunidades Autónomas, entre el «cero», que aplica la mayoría, hasta 12 €/1.000 en alguna de ellas. A partir del 1 de enero de 2019, el IEH se incrementará debido a que el tipo autonómico de este impuesto es asumido por un tipo especial de 18 €/1.000 litros en toda España. «Pagando la electricidad más cara de Europa y con estas subidas del combustible, por más esfuerzos e inversiones que hacemos los agricultores y ganaderos por ser energéticamente más eficientes, nos llevan a un parón de la actividad agraria. El enfado de los agricultores, sobre todo de los profesionales que vivimos de esto, crece todavía más deprisa que el precio del gasóleo y, si no se controla esto, el Gobierno se va a encontrar con una reacción que quizás no se espere». Unión de Uniones considera que la fiscalidad del gasóleo para uso de los profesionales agrícolas debe revisarse, mediante la aplicación de un tipo cero del IEH y la rebaja del IVA al tipo reducido permitido por la normativa europea, además de someter a las empresas distribuidoras de combustibles a una vigilancia activa contra posibles prácticas anticompetitivas.
Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos
China se convertirá en el número uno mundial de la importación de queso
China importó 2000 toneladas de queso en el año 2000, y 108.000 toneladas en 2017, lo que implica un crecimiento del 5.300 %. El queso se está convirtiendo en una de las primeras opciones para los consumidores en las ciudades chinas, especialmente entre los jóvenes. Las importaciones registran una tasa de crecimiento anual compuesto del 27 %, siendo ya el séptimo comprador de queso del mundo en volumen, aunque se considera que el tema solo está empezando. Según Ross Christieson, director del USDEC —Consejo Export Lácteos U.S.A.— para Asia, «China se convertirá en el primer importador de quesos del mundo durante los próximos diez años», señalando cinco factores que contribuirán a este impulso: 1) Aumento del tamaño de las familias de clase media alta y personas influyentes, 2) Una nueva generación de consumidores, más sofisticados y más libres, que nació en la década del 1980, 3) El creciente poder y facilidades del comercio electrónico para hacer llegar el queso a los hogares chinos, 4) El crecimiento en el consumo de la «pizza estilo occidental», junto con la utilización del queso en las recetas para la cocina doméstica y 5) Las cadenas de comida preparada, catering, etc., que están introduciendo el sabor del queso en una cultura que lo desconocía.
Milkpoint, EdairyNews
Leche barata tres años después de las protestas del sector lácteo
Según los datos del mes de septiembre, las principales cadenas de supermercados venden la leche más barata —por menos de 60 céntimos el litro— tres años después de las protestas del sector lácteo. Así, supermercados Froiz registra el precio más bajo, con la leche desnatada Solar a 56 céntimos el litro. Gadis y Eroski le siguen de cerca: la leche entera Camponuestro, producida por Leche Río, es la más barata de la cadena gallega y cuesta 58 céntimos, igual que la leche entera Bomilk de los supermercados Eroski. Hacendado, la más barata del supermercado Mercadona, cuesta 59 céntimos el litro. Por su parte, las leches enteras Aliada y Dia pueden encontrarse a 60 y 61 céntimos respectivamente en los supermercados. El precio medio de la leche más económica es de 58,66 céntimos, que puede acarrear grandes pérdidas para las explotaciones ganaderas. A comienzos de 2018 el número de granjas gallegas disminuyeron hasta 7.916, lo que supone que la comunidad perdió más de medio millar de explotaciones con respecto al mes de enero del 2017. Según el Observatorio do Sector Lácteo de Galicia, el precio que perciben las explotaciones ha caído casi un 4,5 % de media entre enero y julio de este año, con un precio medio de 31,7 céntimos en el mes de enero y de 30,3 céntimos en julio. A pesar de todo, el precio actual se sitúa más de dos céntimos por encima del de hace tres años, cuando en el mes de junio —previo a las movilizaciones— se pagaba a 28,2 céntimos el litro, un 25 % menos que en el mismo mes de 2014. También en septiembre, el sindicato vasco ENBA Nekazal Sindikatua publicaba en Facebook la foto de un expositor de Makro, en Oiartzun —Gipuzkoa—, de «Leche de Galicia» a 49 céntimos, con el siguiente pie de foto: «Vergonzoso. Una vez más Makro España en Oiartzun vende leche o “sangre de ganadero” a precios inaceptables que asfixian la cadena láctea».
Galici@PRESS, ENBA Nekazal Sindikatua
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