- El que se pretende con esta reunión -y con la que se mantuvo el lunes con representantes del sector- es continuar incorporando consensos para reforzar la posición conjunta delante de la negociación para modificar el PEPAC
- La Xunta remarca que la Comisión Europea está manteniendo una postura más ambiciosa sobre la posible flexibilización de la PAC que el propio Ministerio, gracias a la presión negociadora de las comunidades autónomas y tal y como se está poniendo de manifiesto en las reuniones técnicas entre el Gobierno y las propias CCAA en Madrid
- En la reunión con los conselleiros de la Cornisa, al igual que se hizo con las organizaciones agrarias y cooperativas gallegas, se le pidió la estas autonomías que hagan propuestas para enriquecer la batería de medidas en las que está trabajando Galicia
- En el encuentro se puso de manifiesto que estas autonomías tienen unas condiciones específicas muy diferentes de las del resto de España, que exigen uno rediseño concreto de determinadas medidas de la PAC, algo que no se está haciendo desde Madrid
- Se demanda la modificación de los ecorrexímenes y la “condicionalidade reforzada”, para adaptarse a las peculiaridades de estos territorios, así como el alivio de trabas burocráticas como la exigencia del veterinario de explotación o el cuaderno digital
El conselleiro del Medio Rural en funciones, José González, se reunió hoy de forma telemática con sus homólogos de las comunidades de la Cornisa cantábrica para avanzar en una amplia alianza común -en la que también participan las organizaciones profesionales agrarias y cooperativas de Galicia- con el fin de reclamar, de manera conjunta, mayor flexibilidad en la PAC y su adaptación a la realidad de estos territorios. En la videoconferencia convocada desde Galicia participaron, además del representante de la Xunta, Marcelino Marcos, consejero de Medio Rural y Política Agraria del Principado de Asturias; Pablo Palencia, consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria y Arantxa Tapia, consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente y Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Agroalimentaria, ambos del Gobierno Vasco.
Segundo explicó el conselleiro gallego, lo que se pretende con estas reuniones -la de hoy y la del lunes con los representantes del sector- es continuar incorporando consensos para reforzar la posición de Galicia y el resto de los territorios de la España húmeda delante de la negociación entre el Gobierno central y las comunidades autónomas para modificar el Plan Estratégico de la PAC, el llamado PEPAC.
Este encuentro coincide en el tiempo con el que celebra en Madrid el Órgano de Coordinación del PEPAC, en el que participan las comunidades autónomas -entre las eres Galicia- y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. En esta reunión de carácter técnico se puso de manifiesto, a juicio de la Xunta, que la Comisión Europea está siendo mismo “más ambiciosa” que el Ministerio a la hora de abrirse a la flexibilización de la PAC, gracias a la presión negociadora de las comunidades autónomas.
Por eso, en este sentido José González señaló que del que se trata es de intentar consolidar una alianza cantábrica, porque “estamos viendo que, de la misma forma que en la negociación de la PAC la unión de estos territorios fue positiva, entendemos que ahora tenemos que volver a tener esa unión”, remarcó. Así, -indicó el conselleiro- al igual que se hizo con las organizaciones agrarias, si les pidió la estas comunidades que trasladen sus propuestas para enriquecer la batería de medidas en las que está trabajando Galicia, con demandas claves para el futuro del sector, alrededor de las políticas estatales y comunitarias.
De este modo, como ejemplos de reclamaciones concretas, el conselleiro mencionó la reducción de la carga burocrática que soportan agricultores y ganaderos derivada de la nueva PAC, la voluntariedad del cuaderno digital de las explotaciones y la no aplicación de la normativa vinculada a la figura del veterinario de las explotaciones. Sobre las trabas de la burocracia, José González subrayó que estas “se ven muy agravadas por circunstancias coincidentes en la Cornisa cantábrica”, caso del minifundismo, a pluviometría, el relieve y el tamaño de las explotaciones o los tipos de suelo, entre otras.
En esta línea, José González advirtió que las propuestas de modificación del PEPAC realizadas hasta ahora por el Ministerio de Agricultura son “insuficientes” y no se adecúan ni la Galicia ni al resto de la Cornisa cantábrica, ya que “tienen mucho más en cuenta a la España mediterránea que a la húmeda”.
Adaptar los ecorrexímenes y la condicionalidade reforzada a los territorios
En el mismo sentido, el conselleiro insistió en demandar la modificación de los ecorrexímenes y la llamada “condicionalidade reforzada”, para adaptarse a la realidad específica de la Cornisa y no perjudicar sus agricultores y ganaderos. En esta línea, González advirtió que “no hay ningún productor que esté en contra de las exigencias medioambientales de la PAC, pero se están poniendo arriba de la mesa ecorrexímenes imposibles de cumplir” para los agricultores y ganaderos de estos territorios.
Así, sobre la condicionalidade, se considera que deberían reducirse o adaptarse determinados requisitos no acomodados para la Cornisa y que resultan muy difíciles de cumplir en las explotaciones gallegas y de los demás territorios cantábricos.
Cuanto a los ecorrexímenes, se insiste en que los del Plan Estratégico de la PAC (Pepac) no están adaptados la estas zonas y apenas tres de las siete prácticas actuales tienen viabilidad en el territorio cantábrico. De esta forma, se proponen mejorar los relativos al pastoreo extensivo, a las islas de biodiversidad y a la rotación de especies mellorantes e introducir otros nuevos.
Entre estos últimos estarían lo de cultivos tradicionales de bajos insumos, con especial referencia al grelo; lo de cultivos existentes, como la patata y las especies hortícolas -que en Galicia se producen de manera más sostenible- o lo de pastoreo con vacuno de aptitud cárnica, ovino, cabrún y mismo equino en zonas con elevado riesgo de incendios forestales. En relación con estas propuestas, el conselleiro advirtió que todas ellas ya fueron trasladadas al Ministerio a lo largo de la negociación del nuevo PEPAC y que “están avaladas por las organizaciones profesionales agrarias”, sin que se habían tenido en cuenta. La mayores, José González también explicó que se está procurando una alianza común para fijar una posición conjunta en cuestiones estratégicas para el futuro del campo, a nivel estatal y comunitario. En esta línea, se refirió al documento, actualmente en elaboración, que cuenten diferentes demandas, entre ellas la revisión de toda la normativa nacional derivada de las directivas europeas de la nueva PAC, con especial énfasis en la necesidad de reducir la burocracia.
Instar al Gobierno a modificar la Ley de la Cadena Alimentaria
También se quiere procurar consensos para reclamar igualdad en las reglas de juego en los comprados para todos los productores, de forma que en los tratados internacionales con terceros países se incluyan cláusulas espejo que garanticen un trato idéntico para todos los productos. Sobre los precios, se urge al Gobierno a la modificación de la Ley de la cadena alimentaria para que se cumpla de una manera efectiva. Por parte de la Xunta, en concreto, se reclama la introducción de mecanismos como los diseñados por Galicia -Contaláctea y Contacarne- y trabajar en coordinación con las comunidades autónomas para que los precios que perciben los agricultores y ganaderos cubran sus costes, más la margen de beneficio correspondiente. Otra demanda estratégica tiene que ver con la mejora de la fiscalidad para el campo.
Asimismo, se insiste en reclamar del Gobierno que asuma el carácter de potencia agroalimentaria de España para exigir en Bruselas una suspensión urgente y temporal de las medidas europeas que ahogan hoy en día los agricultores y ganaderos. Se trata, concluyó González, de “ganar tiempo” para realizar una reflexión estratégica sobre el futuro del sector, que desemboque en el rediseño de las políticas cuestionadas, favoreciendo una introducción gradual en el territorio.
